Un, dos, tres, por tos mis clownclaveros, por mi primero

Después de la fumata blanca, borrón y puerta nueva. ¡Cada mochuelo a su olivo!

Fueron tres, al castillo del inglés, el inglés sacó la espada y mató a cuarenta y trés.

- ¿Dónde está la china?
- mmm. ¡Ahí!
- Ohhh ¡La queda Fulano!

Cuenta hasta cien mientras nos escondemos. ¡El último la queda!

(no vale esconderse detrás de los cristales)

PD: Quiero ¡¡pero ya!! a todos los clownclaveros visibles y poniendo postillas.

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