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El auténtico memory stick USB 3.0 de última generación (ya sabemos que lo último suele ser retro) ha sido avistado a vista de móvil, por el que me han avisado. Tecnología punta apuntalada por los más dulces recuerdos, aunando progreso con respeto al pasado.
Por supuesto, de fresa ácida, como todo pen drive que se precie.
3 comentarios
Cuando uno da en el clavo, es que lo ha clavao, aquí mejor dicho, cuando uno da en el clavo, es porque lo ha clownclavao, pues eso, amigo Carlos, tu que has dado un gran poste, es un peaso de palo (ya sea el corto o el largo). Es por ello, que magnífico el Palote.
17 enero, 2006 12:45¿Cuántos lotes te has dado de palotes, amigote?
Lo primero, primero:
17 enero, 2006 13:39Postísimo poste donde los haya.
Lo segundo, después.
Vaya sacrilegio... Pendrive ni pendrive...
Como sé que sabréis, todo posteador que se precie, debe dejar algún hueco para las postillas, y es ahí donde se completa el poste :D
17 enero, 2006 13:51En efecto. TRANSPORTÍN es el tecnicismo correcto. Ni penedraif, ni pinrevés ni ná.
PALOTE DE MEMORIA. Por cierto, que ha pasado a la historia... me lo he jamao... Espero acordarme de este momento siempre.
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